basta de flequillo

viernes, 31 de julio de 2009

Me cansé de la foto. O sea, me cansé de ver la foto ahí, porque el fleco viene a full y cada vez mejor domado. Pero se ve que junto con el flequillo me cortaron la inspiración.

Julio se termina y empieza una nueva etapa. Los 30 años de mi concubito, el segundo año de convivencia, el último tramo del año escolar... Y yo creo que este último cuatrimestre (suena muy facultativo, no?) va a estar bueno. Creeeeeeeeeo, como dice Joaquín.

fashion emergency

domingo, 26 de julio de 2009

será

jueves, 23 de julio de 2009

Pensé que estos días me iban a servir para descansar. Para estar más tiempo con mi novio, para ponerme al día con el orden de la casa, para ponerme linda. Pero ya está por terminar la semana y yo siento como que perdí el norte. Llego a casa sin saber muy bien qué hacer, me siento en la compu o miro tele, sin mirar. Sin prestar atención. Sólo paso el tiempo.

Entre el día del amigo y alguna que otra eventualidad, al llegar al sábado Pablo y yo habremos pasado juntos dos de las cinco tardes de la semana. Y no es que eso me moleste. Pero mientras estoy acá en casa, me siento perdida.

Será que los hijos nos marcan el ritmo, será que cuando vivimos en una vorágine tan grande, tan a mil por hora, frenar de golpe es casi imposible. O será que sin Joaquín me siento vacía, chiquita, frágil, ausente.

para que veas que cumplo, Cory

Después de unos cuantos días atípicos (máquina del laburo apestada, con tiempo libre pero sin saber en qué ocuparlo, empezando el entrenamiento de Marie) me siento a escribir dos minutos y a hacer el jueguito que me pasó Cory. Tengo que decir 6 cosas que me hacen feliz. Y aquí van.

Ver crecer a mi hijo feliz
Proyectar con mi novio
La relación que estoy recuperando con dos personas que amo
Tomar mate con amigas
Viajar a Uruguay
Escribir en este blog y que haya gente que me lee

No se lo paso a nadie porque creo que ya todas lo hicieron. Pero viste que cumplí Cory, eh! Y feliz casorio!

sequía

lunes, 20 de julio de 2009

Esta semana Joaquín está con su papá, exprimiéndolo como corresponde, disfrutándolo cada segundo en compensación del resto del año, que lo ve poquito. Así que sepan entender si no tengo anécdotas graciosas para contarles, o fotos graciosas para compartir.


Para mi va a ser una semana de descanso y de extrañitis. Las cosas tienen su lado bueno y su lado malo. Siempre. Aprovecharé para tejer, leer en casa en vez de en el colectivo y para dedicarle más tiempo a mi concubito. Y el domingo ya estaremos otra vez los tres juntos.

Por último y no por eso menos importante, hago uso de este espacio para desearle a todos mis amigos, los de carne y hueso y los virtuales, un muy feliz día. Qué lindo que es saber que estan ahí.

detalle de gastos

miércoles, 15 de julio de 2009

Finalmente después de mucho caminar, pensar y pelearme conmigo misma, desembolsé parte de mi regalo de cumpleaños. No fue todo junto, claro que no, pero en varios días me compré:

Un par de guantes ($14)
Un par de zapatos ($79)
Un sweater ($49)
Un pantalón de vestir ($98 lo más caro, outlet de Akiabara)
Una polera ($29)
Un pañuelo ($20)

Estoy contenta porque hice rendir mi plata, y porque todavía me queda! Todavía no sé que voy a hacer con el resto, si la voy a gastar o la voy a guardar, pero ya no me siento tan mal por tener la plata en el cajón.

Por último y como no podía ser de otra manera, indignada por la relación precio/calidad de las botas que ví, mandé las mías al zapatero.

Y como dice María, chinpún.

demasiados temas importantes en una sola conversación

martes, 14 de julio de 2009

Joaquín: Ma, vos y Pablo se casaron?

Yo: No, Joaqui, no nos casamos.

Joaquín: Y por qué?

Yo: Y, porque para casarse y hacer una linda fiesta hay que tener mucha plata, para hacer una torta grande y comprar maracas gigantes para el carnaval carioca (¡!), y por ahora no tenemos esa plata... pero quizás algún día nos casemos, no sé.

Joaquín: Ahh... porque yo quiero que tengan un bebé.

Yo: Pero no hace falta casarse para tener un bebé! Lo que hace falta es que en la pareja haya mucho amor, que haya una familia que se quiera mucho.

Joaquín: Y vos no lo querés así a Pablo?

Yo: Sí! Yo lo amo, muchísimo! Pero bueno, no es tan fácil, porque además de ganas y amor hacen falta también otras cosas. Imagináte que yo tengo un bebé ahora. Cuando me voy a trabajar, quién lo cuida?

Joaquín: Mmm... ya sé! Se lo podemos llevar a la abuela Susana!

Yo: Pero la abuela tiene que ir a trabajar al depósito! Acordáte que a vos te cuida sólo un ratito después del cole.

Joaquín: Mmm... entonces ya sé! Puede ir a Moruli como yo y después la abuela nos cuida a los dos!

Yo: Pero va a ser chiquito! En Moruli hay salitas a partir de un año.

Joaquín: Mmm... ya está. Ya se me ocurrió la solución. Lo cuido yo!

Yo: Pero Joaqui, vos sos muy chiquito para cuidar un bebé!

Joaquín: Pero si sólo hay que cambiarle los pañales y darle de comer!

Yo: No es sólo eso, además, vos te quedás acá en casa solo? Te cocinás? Viajas en colectivo?

Joaquín: No...

Yo: Bueno, si todavía sos chico para cuidarte vos solito, imagináte para cuidar un bebé! No desesperes Joaqui, ya va a llegar.

Joaquín: Bueno, pero que sea rápido!

círculo

lunes, 13 de julio de 2009

Me quejo de que estoy gorda. El estómago se me ha agrandado hasta alcanzar el tamaño del de María Marta Serra Lima. Como a cualquier hora, cualquier cosa, cualquier cantidad. Como a escondidas de Joaquín para que el no se llene con "porquerías" antes de la cena, pero yo no lo puedo controlar. Me peso. La balanza marca 52 kg, con ropa pesada, de invierno, tapado incluido (como si esto me quitara alguna culpa). Ok, 5 kg arriba de mi peso ideal. Del que tenía hasta hace dos años. En dos años subí 5 kg. Tengo que llegar a 47. Cómo? Ni idea, pero tengo. Pero 52 kg no es tanto, pienso. No Laura, si medís un metro y medio y tus huesos son de telgopor, 52 es mucho. Me bajo de la balanza. Camino con mi novio a Antares a tomar unas cuantas medias pintas de rica cerveza artesanal acompañadas de rabas y papas fritas y vuelvo a casa. A seguir quejándome de que los pantalones no me entran.

volar


martes, 7 de julio de 2009

Hace algunos días me dí cuenta de que me siento permanentemente juzgada en mi rol de madre. Me siento yo sola en el banquillo de los acusados, me hago cargo de comentarios de gente que ni siquiera me conoce y que probablemente no busquen herirme, y me angustio al borde del llanto.
No sé si soy una buena o mala madre. No sé si existe la madre perfecta, la que haga todo bien y tenga una familia ideal, standard, como en las propagandas de Vick Vaporub. Sólo sé que trato de hacer las cosas lo mejor que puedo. Que aunque mi familia es ensamblada en mi casa se respira cariño y respeto. Y que hacemos las cosas a pulmón, como nos salen.
Antes no me interesaba lo que otros pudiera pensar u opinar, y ahora no sólo me interesa, sino que además me afecta, me conmociona, me moviliza. Y vaya uno a saber por qué.

para perica

lunes, 6 de julio de 2009


métodos altamente eficaces para hacer feliz a una madre

jueves, 2 de julio de 2009

Joaquín: Ma, les hice un dibujo para vos y para Pablo.

Yo: Ah, sí? Qué lindo! Y qué dibujaste? Una lucha entre Darth Vader y Luke Skywalker? O a Spiderman atrapando malos con su telaraña?

Joaquín: No, esto.


Mamá y Pablo