Negro

jueves, 16 de agosto de 2007

Hoy venía leyendo en el colectivo de camino al trabajo un libro de Fontanarrosa. La mesa de los galanes, para ser más exactos. Y cuando leo sus cuentos... me dan unas tremendas ganas de escribir! Y de ser la mitad de lo creativo que es él, llegarle a los talones a Soriano o aunque sea parecerme un poquitito así a Casciari. Pero no. Me siento adelante de la máquina, y la mente se me pone en blanco. Cuando todo lo que necesito es que se me ponga en NEGRO.

1 comentarios:

Mi-techo-el-Cielo dijo...

El negro! Cuando le preguntaron como se imaginaba el cielo, su respuesta fue : -"El cielo? Con una canchita de futbol y un bar me alcanza". En este momento seguramente está en la mesa de un bar con la mirada perdida en una figura que se desliza por la calle, buscando algo que no es visible a todos. Imaginando un mundo propio, diseñandolo todo mientras en el pocillo el cafe se enfria, y el boceto que descansa bajo sus manos pide que lo terminen.